El encuentro de la Red Iglesias y Minería con representantes de comunidades afectadas por la minería en América Latina, reunió a más de 30 participantes que llegaron desde Argentina, Brasil, Colombia, Chile, Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador, Perú. Trajeron los gritos de sus comunidades, sus espiritualidades, conquistas, esperanzas, demandas y sus luchas.
El evento, realizado en Brasilia, del 7 al 10 de agosto del 2018, fue convocado por instituciones que acompañan a nivel ecuménico las luchas de estas comunidades en América Latina: CELAM-DEJUSOL (Conferencia Episcopal Latinoamericana – Departamento de Justicia y Solidaridad), CNBB (Conferencia de los Obispos de Brasil – GT Minería), CIDSE (Cooperación internacional por la Justicia global) y la Red Iglesias y Minería.
El encuentro, continuidad del realizado en el Vaticano el año 2015, tuvo como objetivo la articulación y diálogo con las comunidades afectadas por la minería en América Latina y el diseño de estrategias o modalidades de incidencia y asesoría de la red y de las iglesias, a partir de la carta pastoral “Discípulos Misioneros Custodios de la Casa común, Discernimiento a la luz de Laudato Si”, publicada por el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) el 14 de marzo de 2018.
La fraternidad, el debate y la búsqueda del bien común, caracterizaron estos días de trabajo. El compartir orante y eucarístico, alimentó la certeza que llegará un nuevo día especialmente para los pobres cuyo clamor atraviesa los diferentes países latinoamericanos. Durante los momentos de oración, alrededor de la luz del Resucitado, confiados en la Presencia del Espíritu, a través de innumerables símbolos, se recogieron:
-
Los dolores, los sufrimientos, la explotación de los pueblos latinoamericanos, amenazados, perseguidos y despojados de sus derechos y dignidad de hijos de Dios.
-
Los gritos de la tierra y de la comunidad de Santa Rita de Paracatu-MG, fuertemente herida por las actividades de minería y abandonada por el gobierno, generaron sentimientos de impotencia, angustia, tristeza, indignación, coraje, rabia, por la injusticia contra aquellos que son los verdaderos dueños del territorio.
-
Las luchas, resistencias y esperanzas de tantas comunidades que superan el miedo, cultivan la esperanza, el coraje, la solidaridad, la organización, la conciencia y el compromiso de seguir luchando y resistiendo.
-
La memoria de los mártires: Beato Oscar Romero, Berta Cáceres y todos los mártires latinoamericanos cuya sangre derramada continúa clamando por justicia y unificando las luchas y esperanzas por un nuevo cielo y una nueva tierra en toda América. Esta memoria ayuda a comprender las luchas y desafíos de la minería (capitalismo, colonialismo, patriarcalismo), a fortalecer la comunión y organización desde una espiritualidad animada por la Palabra de Dios.
El relato memoria de este encuentro, que nos trae reflexiones, propuestas y acuerdos asumidos, se convierte en un importante documento para responder a la pregunta: ¿por qué las iglesias acompañan a las comunidades afectadas por la minería?, y seguir profundizando nuestra conversión ecológica integral, como nos lo pide el Papa Francisco en su encíclica “Laudato Si”. Le invitamos a leer el texto y compartirlo: