El pasado viernes y sábado el Nodo Perú de la Red Iglesias y Minería se reunió para su encuentro presencial anual. Alrededor de 20 personas de diferentes instancias vinculadas a las iglesias, de más de 7 territorios nacionales, se han reunido para planificar y aterrizar las acciones de defensa de los territorios frente a la arremetida minera. Se tuvo un espacio de análisis de la realidad y una profundización sobre la llamada «transición energética».
Lo tiempos que se viven son de mucha violencia extractivista, de un sistema neoliberal que se afianza y se defiende cada vez más, que se organiza por dentro y que intenta irrumpir por dentro. El sistema extractivo se sigue afianzando con un sistema político y económico que cada vez con más fuerza, tiene relaciones también con las economías ilegales.
Se analizaron también las nuevas narrativas sobre transición energética que afectan a las comunidades, a las propuestas con las que llegan, sin mayores detalles y con una narrativa engañosa, así como lo que estas propuestas que vienen de Europa, significan para América Latina.
Un tema fundamental es la agenda que se tiene como Red Continental de Iglesias y Minería, sobre como incidir de mayor manera en las iglesias, para abordar los impactos concretos de este modelo económico que se denuncia en la Laudato Sí y que toma cuerpo en el extractivismo minero para someter a la Tierra y a la gente. Una de las iniciativas es generar una mayor articulación desde las iglesias para responder a los desafíos socio económicos.
En este encuentro se propició el espacio para el proceso de la Escucha Sanadora, como una alternativa directa de respuesta a las situaciones de defensores y defensoras de los territorios, el aporte desde la Iglesia es acompañar desde la escucha que sana y libera. Para ello, este mes, se realizará un primer espacio de escucha, con mujeres en Cajamarca. Esto permitirá también otras luces para seguir adelante en otros territorios.
