En el marco de la III Caravana por la Ecología Integral, la organización Manos Unidas, aliada para la preparación de este recorrido en España, canalizó un encuentro entre resistencias. La plataforma Salvemos la Montaña de la localidad de Cáceres, está en resistencia contra la explotación de litio en roca. Este colectivo que realiza acciones para develar la información que se oculta en los proyectos de explotación, sensibilización y concientización, incidencia política y movilización social abrió un espacio para encontrarse con un grupo de participantes de la III Caravana por la Ecología Integral venidos desde Perú, Argentina y Brasil, precisamente de los territorios de donde se extrae o pretende extraer litio.

La plataforma Salvemos la Montaña se ha organizado para defender el agua, para exigir transparencia de la información y los planes del gobiernos local sobre su territorio, que consideran es ya una zona de sacrificio. En este espacio se han instalado paneles solares para abastecer de energía a ciudades más grandes, mientras que la zona circundante a la montaña está abandonada.

En este espacio de intercambiaron la situación de vulneración y violación de derechos  por parte de las intervenciones mineras en Puno, en Brasil y en Argentina.  Para Vito y Ranilson defensores latinoamericanos, este encuentro ha sido muy significativo, para comprender y sobre todo sentir, que la lucha por cambiar el sistema es de muchas personas, muchos colectivos «somos zonas de sacrificio, compartimos lo mismos sufrimientos» confirmó Vito Calderón de Puno, Perú, donde se extraerá litio y uranio en roca y donde la mayoría de la población vive con metales pesados en la sangre, los niños sufren de anemias severas y donde los campesinos y defensores indígenas, son asesinados, perseguidos y criminalizados.

Una de las propuestas de continuidad de este espacio de intercambio, fue propiciar espacios de diálogo entre las resistencias del Norte y el Sur, para poner sobre la mesa la narrativa de la modernidad, el desarrollo, el progreso y lo que esto implica, porque en América Latina, también se expande esta narrativa, que es un espejismo.

Porque en los territorios la minería no tiene nada de verde ni de sustentable, afirmó Ranilson Guajajara.