Monseñor Eugenio Coter, obispo del Vicariato Apostólico de Pando en Bolivia, manifiesta su preocupación por la contaminación de los ríos amazónicos con grandes cantidades de mercurio. Cómo se sabe, el mercurio, un contaminante tóxico altamente perjudicial para la salud de los seres vivos, es utilizado por la minería en su búsqueda de oro en los ríos.
Según estudios médicos, los problemas de salud pública que plantea el metilmercurio en los pescados y mariscos son complejos. Particularmente afecta la salud de las mujeres en edad fértil y a los niños. Pero, cualquier persona que coma mucho pescado puede estar en peligro si constantemente come pescado con alto contenido de mercurio.
La Diócesis de Monseñor Coter, tiene en el Río Madre de Dios uno de los principales proveedores de pescado. Lastimosamente dicho río es uno de los más contaminados por mercurio del mundo.
En entrevista con la Red Iglesias y Minería nos indica que “Bolivia tiene un desafío grande en el tema de la minería. Hablo de mi Vicariato, son 500 kilómetros del Río Madre de Dios, donde hay 200 plataformas, contada una por una, que sacan del río un promedio de 40 gramos de oro cada día. Pero, claro que trabajan con mercurio. Supuestamente dicen que hay ficha ambiental, que el gobierno controla que no haya contaminación. Pero, nada garantiza esto.”
Por cierto, indica preocupado, “los pescadores, cuando les preguntamos ¿de dónde viene el pescado? (sabiendo del problema… y ellos saben que sabemos), dicen siempre que el pescado no viene del río Madre de Dios ni del río Beni, que tiene el mismo problema, sino que dicen que viene de otros ríos o de las lagunas. Y, a la pregunta entonces de ¿qué hacen con este pescado contaminado del río Madre de Dios?, ellos dicen: “ese pescado lo mandamos a la capital”.
“Se trata entonces de un serio problema que afecta sobre todo a las comunidades que viven en las riberas de los ríos y, de todas las personas, por lo que debemos estar al cuidado de la naturaleza”.
Para Monseñor Eugenio Coter, quien también es coordinador de la REPAM en Bolivia y miembro del consejo pre sinodal para la Amazonía, en su Vicariato es urgente hacer un estudio para medir los niveles de contaminación de los ríos:
“Ha sido interesante el encuentro en Puerto Maldonado, donde CARITAS, por medio de un proyecto, ha hecho un estudio sobre la contaminación de Mercurio de los niños de las comunidades de pescadores de río, haciendo un seguimiento a los datos de contaminación (Esto, sería una cosa interesante para nosotros mismos).
Tenemos entonces, todo un desafío para la comunidad cristiana. Ojalá alguien nos ayude a hacer un estudio como el que hicieron en Puerto Maldonado, porque esto sería una garantía que daría tranquilidad a muchos padres de familias pobres en Bolivia.”
Es importante conocer que el contacto con el mercurio no es dañino solo para las personas que consumen el pescado contaminado, sino también para los mineros que trabajan con dicho producto y para toda la flora y fauna que se alimenta con el agua contaminada. Indudablemente, todo un gran tema para el próximo Sínodo Panamazónico, que se realizará en el Vaticano en octubre del 2019 y para el próximo encuentro con las comunidades afectadas por la minería, que tendrá lugar en Brasilia del 7 al 10 de agosto de este año.